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Mi vida era un infierno porque era un padre sin amor

Aprendí a ser un esposo amoroso y un padre comprensible y afectuoso.

Mi vida era un infierno porque era un padre sin amor

– Era un hombre muy explosivo, lo que me convertía en un esposo violento hacia mi esposa. Todo este carácter era causado porque era adicto a las drogas y por la forma que fui formado. En casa desde muy pequeño fui enseñado a no tener compasión por nadie y de esa manera me convertí en mi vida adulta en contra de mi propia familia. El tiempo pasó y me convertí en un padre que no mostraba el menor afecto hacía mis hijos y trataba a mi esposa como si ella fuera un hombre. Ella no podía responderme porque yo alzaba tres veces el nivel de mi voz. Mi vida era un infierno porque mi forma de ser y el vicio de las drogas estaban afectando mi relación con mi familia y nuestra vida financiera.

– Mi esposa conoció primero la Iglesia Universal y tiempo después ella me invitó para participar en los servicios de fe. De esa manera fue como al llegar a la Iglesia Universal, comprendí que necesitaba una ayuda espiritual. Así fue como comencé a luchar por mi felicidad hasta lograr mi liberación espiritual del vicio y de todos los tormentos espirituales que provocaban que fuera un esposo y padre agresivo. Perseverando en los servicios, escuché hablar del Espíritu Santo, así fue como toda mi vida empezó a cambiar porque aprendí a ser un esposo amoroso y un padre comprensible y afectuoso.

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